Celulitis


Se trata de una acumulación de grasa en las células adiposas de la hipodermis. Las membranas poco elásticas que las envuelven se deforman y tiran de sus puntos de fijación cutánea, lo que provoca la aparición de hundimientos. Estos adipocitos engrosados quedan inmersos en el fluido plasmático estancando la sustancia fundamental, que empieza a endurecerse. La sustancia fundamental es muy rica en agua, pero se pone más viscosa y densa cuanto mayor es el adipocito, lo que provoca retenciones, convirtiéndose así en una red que atrapa a los nuevos adipocitos formando nódulos, que son fáciles de detectar al tacto y forman la llamada “piel de naranja”.

Hay varios tipos de celulitis y son muchos los factores responsables de su formación de la celulitis, como factores hormonales, genéticos, mala alimentación, sedentarismo o mala circulación, por eso su prevención y tratamiento suponen un control y actuación en más de un aspecto.

De nada sirve trabajar sobre las acumulaciones de grasa y adipocitos si no actuamos sobre las causas que los provocan, por tanto con Reducel de Freihaut trabajamos sobre tres objetivos fundamentales que son causa y consecuencia de la celulitis:

1. Actuación sanguínea: llamada de sangre mediante la loción caliente para facilitar el intercambio de fluidos en el tejido conjuntivo.

2. Disolución de grasa y equilibrio del metabolismo del adipocito. De este modo logramos estos objetivos mediante la aplicación del suero y la loción de canela.

3. Drenaje y depuración de toxinas. Es muy importante mejorar el torrente linfático y llevar a depurar todas las toxinas producto de la combustión de grasas, ya que la ralentización linfática es causa y consecuencia de la celulitis.

MÁS TRATAMIENTOS